jueves, 19 de junio de 2014

After Jude. Capítulo 10.

Reality.
After Jude. Capítulo 10.

He llegado a la conclusión de que es un asco que nosotros tengamos qué metafóricamente vomitarle nuestros corazones y nosotros no sabemos nada de usted.
  Y ya. Sólo quería marcar ese punto.
Prosigamos.
Hace una semana, yo conocí a un chico. No le diré su nombre puesto que esto de que sepa todo de mí ya me está volviendo loca. La primera vez que me pidió mi número, no quería hablar con nadie más acerca de ello que con Jude.
  Y eso me ha hecho pensar algo.
Es imposible para mí tener un cierre cuando nunca le dejé ir.
Pensé que lo había hecho, ¿Sabe? Cuando abandoné ese lugar, que estaba intoxicado de él. Pero eso era todo lo que era: Un lugar. Conduje cientos de kilómetros para comenzar de nuevo y ser un adulto, pero supongo que en el fondo siempre he sabido que nunca he dejado de sostener la mano de Jude.
Y ahora, no sé cómo dejarlo ir.

Dejo la computadora y me pongo los audífonos. Un minuto después, empiezo a cantar. A gritar, más bien:
--¡LET IT GO, LET IT GO!
¡CAN’T HOLD IT BACK ANYMORE! ¡LET IT GO, LET IT GO! ¡TURN MY BACK AND SLAM THE DOOR!

Al diablo el periodismo, yo voy a ser cantante.
Me dejo caer en la cama y escucho la misma canción hasta que la noche cae, total y completamente deprimida.




                                                                                      
          




Los días pasan rápidamente, y antes de que lo sepa, mañana es el día de entrega.
Y aún duele cada vez que escribo.


Incluso cuando no soy una creyente, a veces voy a la iglesia, ya sabe, por el cumpleaños de Jude. Su madre me anima a que haga eso por él, a pesar de que no tiene sentido para mí. Pero lo hago todos los años para no dejarle saber a la señora Perkins que puedo ser una perra.
  En mi defensa, Jude no era un creyente y se me estuviera viendo desde allá arriba, donde sea que sea (Aunque también está la posibilidad de que no haya nada después de la muerte. Si no crees en Dios no crees en el cielo, ¿Cierto?) resoplaría y me dijera que moviera mi trasero a alguna otra parte.
  Se lo cuento porque mañana, el día de entrega (O sea, ahora para usted que está leyendo esto, si sigue leyendo) voy a pegar mi trasero en esa pequeña iglesia blanca cerca de la universidad. Eso significa que voy a tener tiempo para pensar. Lo que significa que voy a traer de vuelta a Jude y voy a terminar llorando por su pérdida.
  Y luego voy a llorar por mí. Porque he fallado éstas últimas semanas en encontrar mi cierre; He estado viviendo con Jude todos estos años. No sé cómo desprenderme de él sin abandonarlo completamente.
  Señor Morgan, creo que soy un fracaso.


El último pensamiento hace que mis ojos ardan y las lágrimas salgan.
“Oh, Jude. Me está haciendo mucho daño. Necesito dejarte ir”.
Sigo hablando con él mentalmente, hasta que de pronto no es suficiente. No es suficiente decirlo en mi cabeza, silenciosamente. Necesito que me escuche. Necesito gritarlo.
  No puedo seguir escribiéndolo en papel, a la persona equivocada.
Todo este tiempo fue a la persona equivocada.
 Antes de saber lo que estoy haciendo, llamo a Terra y le pido prestado su carro por unas horas.
  El auto es viejo y batallo para encontrarle el truco, pero finalmente, comienzo mi viaje por carretera. Y unas largas horas después, el cielo se está oscureciendo, pero a mí no me importa.
  Mi garganta está quemando.
Y sé que soy una maldita loca, pero estoy segura como el infierno que no me importa.
  Llego a la tumba de Jude y mi pecho va arriba y abajo, como si hubiese corrido un maratón.
--JudeMi voz tiembla, pero continúo de cualquier maneraEres un egoísta hijo de perra. Eres un imbécil. ¡ Yo abrí mi corazón metafórico para ti y lo tomaste y luego lo tiraste! ¡Como si yo no fuese nada! ¡Como si no valiese la pena luchar por mí! Pudiste seguir yendo con tu psicólogo, pero eras demasiado arrogante y presumido para admitir que necesitabas ayuda. ¡Tal vez tú eres el que está muerto, pero el resto de nosotros morimos contigo! ¡Y no creo que a ti ni siquiera te importe, egoísta engreído hijo de puta!
  Digo la última parte en un grito y quito el pelo de mi cara mientras siento el aire golpear mi rostro mojado, haciéndolo frío.
--Y aun así te quiero con todo mi corazónAdmitoY siempre lo haré, incluso cuando eres un imbécil y a veces te odio. Te quiero. Pero necesito dejarte ir. Necesito soltar tu mano.
  Ahora en verdad estoy llorando; Me arrodillo frente a tu tumba y me doblo.
--Necesito decirte que es demasiado doloroso. Y lo siento. Pero necesito elegirme a mí sobre ti. Necesito siempre elegirme a mí sobre cualquier otra persona.
    Y en este momento, sé que estas son mis palabras de clausura.


--Sthep Stronger.


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